Cheyenne Manufactured in Berlin Cheyenne Manufactured in Berlin Mobile

Hecho en Berlín

Desde 2006 desarrollamos y producimos en Berlín equipos de tatuaje profesional. Elegir Alemania como centro de producción fue una decisión meditada: cumplimos con los estándares de calidad más elevados para ofrecer a nuestros clientes la mejor calidad y una gran seguridad.

Somos Cheyenne

Desde 2006 desarrollamos y producimos en Berlín equipos de tatuaje profesional. Elegir Alemania como centro de producción fue una decisión meditada: cumplimos con los estándares de calidad más elevados para ofrecer a nuestros clientes la mejor calidad y una gran seguridad. Made in Germany - Manufactured in Berlin.
Hoy somos líderes del mercado en equipos de tatuaje de gran nivel y suministramos nuestros productos a más de 63 países de todo el mundo.

Producimos herramientas manuales para artistas del tatuaje

En colaboración con artistas selectos, fabricamos equipos de tatuaje innovadores. Producimos máquinas rotativas potentes y fiables, cartuchos de aguja esterilizados en numerosas configuraciones, mangos ergonómicos y accesorios prácticos de tatuaje. En especial nos identificamos como fabricantes de material desechable de alta calidad.
Es especialmente importante para nosotros el diálogo con el artista del tatuaje, pues solo así podemos enriquecer el mercado con aquello que el tatuador necesita para su trabajo: dispositivos sencillos que sean fáciles de manejar y agujas para tatuar de calidad que ofrezcan la máxima seguridad.

Calidad excepcional, cosas geniales. "Lo mejor que se puede tener".
Bene Bader, artista del tatuaje de Alemania

Cumplimos con los estándares médicos

La higiene y la seguridad lo son todo en el mundo del tatuaje. Los orígenes de Cheyenne se sitúan en la tecnología médica, con lo cual contamos con el conocimiento necesario y la posibilidad de cumplir los estándares médicos más exigentes en nuestra producción de agujas.
Todos nuestros cartuchos disponen de una membrana protectora patentada por Cheyenne, la cual mantiene alejados los líquidos del mango y de la máquina. Esta membrana de protección garantiza la más alta seguridad, tanto para los artistas como para sus clientes.

"El cliente es lo más importante. Nunca utilizaría otra cosa que no fueran los cartuchos originales de Cheyenne de forma que expusiera a mis clientes a un riesgo".
Julian Siebert, artista del tatuaje de Alemania

Nos centramos en el artista

Nuestra misión es proporcionarle al artista un equipo que minimice el esfuerzo durante su trabajo. Nuestros productos deben simplificar procesos complejos. Así, el tatuador se puede concentrar en lo importante y dar rienda suelta a su faceta artística.
Hacemos mucho hincapié en la innovación, la calidad y la seguridad. Estos tres aspectos nos ayudan a equipar a los artistas con lo mejor de lo mejor – así, promovemos su libertad creativa.

"Antes de cambiarme a la Pen de Cheyenne tenía que preparar varias máquinas y varias agujas. Desde que utilizo la Pen solo tengo que tener listos ocho cartuchos que funcionan como si tuviera ocho máquinas diferentes. ¡Son como ocho máquinas en una!"
Bob Tyrrell, artista del tatuaje de Estados Unido

Queremos promover el sector del tatuaje

Con nuestros productos ya hemos podido revolucionar varias veces el sector del tatuaje. Nuestros cartuchos fueron los primeros cartuchos de aguja desechables para máquinas rotativas y han catapultado a otro nivel los aspectos de higiene y comodidad.
Trabajamos constantemente en mejorar nuestros productos. Por un lado, pretendemos enriquecer el mercado con aquellas herramientas que facilitan significativamente el trabajo manual del tatuador y darle así más tiempo para su arte. Por otro lado, queremos cubrir las necesidades crecientes de los artistas del tatuaje.

"Cuando salió la HAWK Thunder al mercado, pensé que no había nada mejor.
¡Luego vino la HAWK PEN!"
Alex de Pase, artista del tatuaje de Italia

A la memoria de Konrad Lackner

Konrad Lackner fue el hombre que introdujo Cheyenne en la historia del mundillo del tatuaje. Cuando Cheyenne sustituyó la tradicional máquina de bobina por la máquina rotativa a motor, Konrad fue el que consiguió vencer el escepticismo inicial de los tatuadores. Hasta ese momento, nuestras máquinas con motor solo se utilizaban en el sector del maquillaje permanente y muchos artistas del tatuaje expresaban dudas y críticas en cuanto al uso de las rotativas para "tatuajes de verdad".
Konrad Lackner fue un visionario: supo ver el valor que aportaba esta técnica al sector del maquillaje permanente y aplicó sus usos al mercado del tatuaje. Konrad ayudó a lanzar la primera máquina rotativa viajando por todo el mundo y convenciendo a los artistas del tatuaje de que probaran la Cheyenne Hawk. Así consiguió difundir nuestra marca con éxito por todo el mundo.
Konrad Lackner falleció en verano de 2017. Dejó un gran número de seguidores, muchos compañeros, innumerables amigos y muchas personas asombradas por su trabajo.